lunes, 1 de mayo de 2023

No quiero añorar esta zona - Publicado el 1 de mayo de 2023

Atravieso la calle de San Marcos y añoro las escaleras ante el Palacio de la Diputación, aquellos peldaños que conferían tanto empaque a nuestro mejor edificio civil. Añoro su jardín frontal, que daba belleza al entorno. Añoro sus fuentes, que conferían serenidad al conjunto. Todo aquello sucumbió a una marea de granito y mármol, materiales nobles usados con fines incomprendidos. Aquello tiene la virtud de unificar la opinión de los lucenses, pues a casi nadie nos gusta.

Ahora se nos anuncia que se peatonalizarán diversas calles de aquel entorno, y pregunto ¿qué se ha decidido hacer con las plantas presentes en ellas? Porque, curiosamente, estamos en una zona muy singular en cuanto a árboles y arbustos se refiere.



Para empezar, en la calle Montevideo, jalonando la fachada del I.E.S. Juan Montes, hay una buena hilera de aligustres que, en su día, fueron podados en forma de sombrilla. Quiero decir, para quien no lo sepa, que la forma especial de un árbol obtenida mediante poda, es una tarea que lleva años conseguir y que es propia de un equipo de técnicos realizando una labor continuada, pues si se desentienden algunas temporadas, tal labor y tal aspecto se pierde por completo. Sería necesario volver a empezar, si se quisiera recuperar. (En Lugo se ha perdido el aspecto de sombrilla, entre otros lugares, en los aligustres del jardín de San Roque y en los de la calle Montevideo).

En el jardín de San Fernando hay muchos árboles de los que hablar. Pero antes quiero hablar de la pequeña porción ajardinada que se conserva adosada al antiguo cuartel. En ese pequeño reducto es donde más rosales tenemos en Lugo, con los setos, de boj o de aligustre, mejor mantenidos de nuestra ciudad.

El jardín me gusta mucho y temo por él. Me gusta su suelo de aire rústico con la hierba que se mete entre las juntas de sus losetas. ¿Nos lo sustituirán por el triste gris, tan apreciado por esos lucenses que tienen capacidades decisorias? Esperemos que no.

El jardín lo podemos dividir en dos partes, la de arriba, en nivel superior, y la inferior, lindante con la muralla. En la parte alta añoro el calendario floral que hubo en tiempos, hoy tal vez insostenible. En esta parte, los árboles están esparcidos de modo conveniente, de modo que es posible apreciar la forma de sus respectivas copas. Hay algo en él que se puede considerar metafórico: dos árboles ajenos a nuestra flora, un magnolio y un pruno, tienen atosigado, sin dejar desarrollarse plenamente, a un acebo, único ejemplar autóctono presente. En el mismo jardín, alejado de éste, hay otro acebo de dimensiones considerables, si tenemos en cuenta que hablamos de arbustos. Hay también un fresno, otro representante de nuestra flora y escaso en jardines lucenses.

Cerca de la muralla, los árboles están más abigarrados, algo común en nuestra ciudad. Pero hay más ejemplares únicos dentro del casco amurallado,, como es el caso de un castaño de Indias y, también, un árbol del amor que, él solo, luce más que todos los que malviven frente a la Diputación. También como plantados al tresbolillo, hay varios camelios rojos.

Me apena que la parte lateral de la iglesia de San Froilán esté amenazada por una piqueta tal vez ignorante de cuanto arranque. Allí, en aquel pequeño triángulo, tenemos un tejo recortado en forma de cúpula oriental. Esa forma se consigue después de muchos años de concienzudo trabajo de buenos jardineros que, año tras año, mantienen una morfología diseñada por alguien que, quizá, presintiese que no lo vería en su forma actual. Hoy es un hermoso ejemplar de jardinería ornamental del que debemos sentirnos orgullosos.

De modo extraño, hay allí un ejemplar de adelfa, creo que el único presente en Lugo. Se trata de una planta arbustiva propia de climas mediterráneos. Tiene flor roja. En verano de 2022 fue sometida a una severa poda, de la que se está recuperando y tal vez pronto luzca su forma compacta. En zonas de clima mediterráneo se utilizan como plantas de jardín. En Lugo, sólo conozco este ejemplar.

Por toda esta singuladidad, me gustaría que se respetase este ajardinamiento, .no quiero añorarlo.

15 comentarios:

  1. Hoy voy a ser extremadamente duro,ruego me corrijas,mi querido profesor.En Lugo tenemos lo que queremos,y lo que queremos que se haga se hace,mexan por un e din que chove...deixar gobernar a Unha patraña,que logo cando ten as alas fai patrañadas,e coloca un bloque,así de claro un bloque de cemento,onde antes había natureza,Auga,fontes e luz,e limitase a quitar,todo o que nos pode axudar,a respirar os lucenses,e decirlle adiós a un contorno noso,que nos atracaron ata deixarnos sin el,así de claro,e o final bonito como me gusta,dende o pouquidimo senso,as dificultades e creo que as poucas esperanzas de vida que lle quedan,un beso de Carmucha.

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  2. Tienes así. Están donde están porque los han querido los lucenses. Luego, la ignorancia se hace poderosa. Ya ves. Solo una corrección. En San Marcos no hay cemento ni hormigón, es granito y mármol, pero mal utilizado y, según mi opinión, sin criterio estético. Besos a mamá.

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  3. La fuente del jardín de San Fernando que está en la zona ajardinada adosada al cuartel me trae ecuedos de la infancia, cuando estudiaba en el colegio de la Mmilagrosa.
    Abrazos
    Chiruca

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    1. A ti y a más personas. Desconozco su destino, ojalá permanezca. Por ella misma y por su significado histórico. Besos, Chiruca.

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  4. Grazas, unha vez máis, Emilio, polo saber e polo opinar.
    Concordo contigo na defensa das árbores nas cidades, de como son patrimonio non só natural senón tamén da memoria propia. Eu sinto cada vez que se perden e ao pasar saúdo a súa ausencia, en Santiago, diante de San Martín Pinario ou do mosteiro de Conxo.
    Saúde e natureza!
    Pilar

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  5. Grias, Pilar, por tu comentario. Para mí también los árboles forman parte de nuestro patrimonio urbano, que muchos no lo quieren ver. Besos.

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  6. Estimado Emilio,
    Supoño que todos botaremos en falla ese xardín se non logramos que se recapacite e se modifique o proxecto para a praza do Ferrol.

    Pero se vai a botar en falla ese recuncho, non quero imaxinar (pero sí quero saber) o que pensará do que se pretende facer na praza de Santo Domingo, onde se proxecta quitar o xardín de diante do convento, para substituílo por un espazo de formigón poroso e onde as árbores actuais (o gingko, os camelios,...) supostamente se trasplantarán cara a zona da rúa Montevideo e Amor Meilán.
    Pero é que ademais para Santo Domingo o que se pretende, despois de quitar o que hai, é prantar perais de callery (Pyrus calleryana), que son coñecidos polo seu particular cheiro, que uns describen como a semen, outros a vómito e os máis elegantes a peixe podre.

    Santo Domingo sería mellorable, pero se cadra todos rematamos añorando o que hai.

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    1. De Santo Domingo, lo que más me gusta es la promesa de la alcaldesa de poner naranjos alternando con bancos, precisamente ante la entrada de la iglesia. Esos naranjos ya están allí, alternando con bancos y faroles de tipo isabelino. Pero ya están, no hay que ponerlos. Tal vez a la alcaldesa se le pasó el detalle. Del resto, tampoco sé qué decirle. Prefiero el suelo de hormigón prensado (lo podemos ver en el parque de FRIGA), pues es poroso, antiresbaladizo y cada pieza tiene su propio color. generando un conjunto, a mi entender, acogedor. De los árboles hay mucho que hablar. En Lugo se tiende a amontonarlos y eso es como están junto al Gingo, el rododendro, y otros antos. Me gusran más esparcidos de modo que podemos contemplar sus respectivas copas. Echo en falta árboles y arbustos propios de nuestra flora autóctona, y hay bastantes, como acebo y serval. En cuanto a los camelios trasladados, es otra teima lucense, tanto para monumentos, como el de Juan Montes, como los diversos amgnolios que estuvieron en la calle de la Reina, /cuando había dos hileras de árboles en ella) y hoy sobreviven esparcidos por diversos lugares de Lugo.
      En fin, la ignorancia es atrevida, no lo digo yo, lo dice nuestro refranero.
      Un saludo, cuando quieras, damos un paseo viendo y comentando sobre jardines lucenses.




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  7. Vives las ciudades de una forma especial, ves lo que pocos son capaces de ver y lo cuentas de forma que nos lo pones delante de los ojos, aunque estemos lejos. Delicias de paseos contigo.

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  8. Gracias por verme de ese modo. No sé hacerlo de otro modo. Pero se sufre, ?saves¿ viendo desmanes silenciados, tal vez consentidos.

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    1. Consentidos, quiero decir, por ciudadanos que no se atreven o no quieren dar la cara cuando de trata de defender lo propio como lo que es, un bien patrimonial. Aquí se han hecho muchos desmanes y las críticas quedan para charlas de café y en vos baja.

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  9. ¡Ay, Emilio, si fuera mármol lo que hay en San Marcos! No: es plástico, puritico plástico.
    Visto tu comentario, me parece precioso y muy oportuno, como sabes que se dijo en donde fue muy bien recibido.
    Un abrazo.

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    1. Granito y más granito en suelo, bancos y en unos prismas de sección cuadrada que hay al tresbolillo por allí. ¿Es plástico el material con el que están formado los pilares blancos? Uno se equivoca, claro. Ya ves, los quise mejorar. Un saludo.

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  10. Muy bueno lo de la poda de los aligustres, y la adelfa, no sé gran cosa de plantas pero me interesa el tema, cómo poder reconocerlas, y los detalles de los cuidados que requieren. Tengo que ir por las zonas que dices para fijarme bien. Mencionas ciertos cambios pasados en zonas de la ciudad, y espero que éstos cambios que vienen sean positivos... Lo que se comenta para Santo Domingo por ejemplo no da mucha tranquilidad que digamos. Y sí, el jardín de San Fernando es precioso de verdad. Saludos. Silvia

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  11. Para mí, el más bonito del centro amurallado, después de ver lo que queda del antiguo de la Plaza Mayor. De Santo Domingo sólo me ha llegado el rumor de que quieren poner hormigón prensado en el suelo, y me gusta. Pero también me gustaría allí más césped y menos amontonamiento de árboles, un vicio muy de nuestros jardineros. Saludos, Silvia

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